FOTOS CORTESÍA: LILIANA ESTRADA / OCESA
La noche del pasado fin de semana, el Estadio GNP se llenó de nostalgia y rock con la presentación de Caifanes, una de las bandas más icónicas del rock en español. Miles de fanáticos se reunieron para revivir los éxitos que han marcado generaciones, en un evento cargado de emoción y energía.
El concierto inició alrededor de las 21:00 horas, con un ligero retraso que solo incrementó la anticipación del público. Saúl Hernández, acompañado por Alfonso André, Diego Herrera, Marco Rentería y Rodrigo Baills, abrió la noche con “Miedo” y “Viento”, dos temas que fueron coreados al unísono por todos los presentes.
A lo largo de las más de dos horas de concierto, Caifanes llevó al público por un viaje musical que incluyó clásicos como “Antes de que nos olviden”, donde proyectaron imágenes poderosas relacionadas con la violencia y la desaparición de personas en México, lo que dio un toque de conciencia social al espectáculo. Temas como “Los dioses ocultos”, “Para que no digas que no pienso en ti”, “Aviéntame” y “Afuera” hicieron vibrar el estadio, mostrando la conexión inquebrantable entre la banda y su audiencia.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la interpretación de “Canción sin miedo” junto a Vivir Quintana, una canción que se ha convertido en un himno en la lucha contra la violencia de género. Además, la participación de Guillermo Briseño en “María de mis alquimias” y de Sergio Arau en “Alarmala de tos” añadió un toque especial, trayendo al escenario a figuras importantes del rock mexicano.
A pesar de algunos problemas técnicos iniciales, como pantallas que no encendieron y dificultades de sonido que algunos asistentes reportaron, la banda y su público se mantuvieron conectados, olvidando cualquier inconveniente para disfrutar de una noche que quedará en la memoria de todos los presentes. La lluvia, que amenazaba con interrumpir el evento, se mantuvo al margen, como si el universo conspirara para que nada arruinara esta noche mágica.
El concierto concluyó con “Afuera”, un clásico infaltable que dejó a todos los asistentes con una sensación de euforia y gratitud por haber sido parte de una noche histórica. Pero eso no sería suficiente. El encore se dio con la interpretación del Himno Nacional Mexicano, seguido de “Nos vamos juntos”, “Te lo pido por favor”, “Aquí no es así” y el cierre definitivo lo llevó “La célula que explota” y “La Negra Tomasa”.
El Estadio GNP, recién renovado, fue el escenario perfecto para este encuentro entre Caifanes y su legión de seguidores, reafirmando el lugar de la banda como una de las más importantes del rock en español.
