Por Luis Martínez Alcántara
El CEO de BlackRock, Larry Fink, afirmó que la mayoría de los directores ejecutivos con los que ha conversado consideran que Estados Unidos ya se encuentra en una recesión.
Durante una presentación en el Economic Club de Nueva York señaló Fink que “la economía se está debilitando mientras hablamos” y que “la mayoría de los CEOs dirían que probablemente estamos en una recesión en este momento”.
También advirtió que los mercados bursátiles podrían caer otro 20% debido a las recientes políticas arancelarias implementadas por el presidente Donald Trump.
Estas medidas han generado preocupaciones sobre una posible estanflación, una combinación de estancamiento económico e inflación. “Los aranceles conducirán a precios más altos, lo que aumentará la presión inflacionaria”, explicó.
Además, Fink expresó escepticismo respecto a una posible reducción de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal en el corto plazo. Indicó que no ve posibilidad de que la Fed reduzca las tasas cuatro o cinco veces este año, dada la perspectiva inflacionaria actual.
Otros líderes financieros también han manifestado inquietudes similares. Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase, advirtió que los aranceles podrían desacelerar el crecimiento económico de EE.UU. y aumentar la inflación. “Los aranceles pueden tener consecuencias negativas duraderas”, escribió Dimon en una carta anual a los accionistas.
La combinación de políticas comerciales restrictivas y la falta de estímulos monetarios plantea desafíos significativos para la economía estadounidense. Los líderes empresariales instan a la administración a reconsiderar su enfoque para evitar una recesión más profunda y prolongada.